Perder el cabello es uno de los golpes más severos que nos podemos llegar a llevar en términos de estética. Sin que podamos hacer nada al respecto, nuestro pelo se va cayendo hasta despoblar por completo la zona de la cabeza. Un verdadero punto de inflexión para nuestra autoestima. No obstante, mientras que en el pasado esto era un problema imposible de solventar, hoy en día se ha asentado la solución más efectiva de todas: el injerto capilar. Una intervención que nos devuelve nuestra melena para que recuperemos así esa confianza personal que, junto a nuestro cabello, nos había ido abandonando poco a poco.
Cómo funciona el injerto capilar y por qué triunfa tanto
A lo largo de la historia, ha habido muchos tratamientos que prometían el cielo y la tierra a la hora de devolver el pelo a los pacientes. Ninguno de ellos tenía resultados óptimos. Sin embargo, el mundo de la estética cambió por completo cuando llegó a nuestras vidas el injerto capilar. Un procedimiento que consiste en mover el cabello sano del propio paciente a zonas que ya están despobladas. Debido a ello, el grado de aceptación del implante es ejemplar, ya que estamos hablando de folículos extraídos de áreas del cuerpo con alta densidad; es decir, de pelos sanos.
Con unos resultados duraderos y naturales, esta operación se convirtió en una de las más solicitadas del mundo de la belleza. Tal ha sido su éxito que en poco tiempo ha habido grandes avances en la metodología de implantación. De hecho, existen dos técnicas diferentes para trasplantar el cabello: la FUE y la DHI. La primera consiste en hacer pequeñas incisiones inferiores a 1 mm de diámetro, siendo la FUE con zafiro la más innovadora de todas. Por su parte, el método DHI es de implantación directa del folículo. En ambos casos se goza de una notable efectividad en el procedimiento.
Además del hecho de volver a disfrutar de un peinado espectacular durante muchos años más, toca destacar que el injerto capilar es una intervención segura. Como cualquier otro tipo de operación, hay ciertos riesgos que se deben tener en cuenta. Ejemplo de ello es el sangrado, la pérdida de sensibilidad o la hinchazón. No obstante, acudiendo a las mejores clínicas, se garantiza que todo salga a la perfección; habiendo de seguir, eso sí, las indicaciones del médico en cuestión para una pronta recuperación.
Ahorra en el injerto capilar sin perder calidad asistencial
Dicen que para lucir hay que sufrir y, cuando hablamos del injerto de pelo, quien suele sufrir en nuestra cartera. Si bien es cierto que España ya ha dado la bienvenida a este tipo de asistencia, hay que comentar que el precio sigue siendo demasiado caro. De hecho, la media europea oscila entre los 5.000€ y los 12.000€ por este tipo de intervenciones. Un gasto al que no todo el mundo está dispuesto. Sin embargo, esto no significa que no podamos recuperar nuestra melena, ya que es posible ir a la mejor clinica trasplante capilar Turquia sin que ello suponga un sacrificio económico.
Turquía es la verdadera cuna del injerto capilar. Un país al que millones de personas de todo el mundo han estado viajando para someterse a este tipo de tratamiento. Uno de los grandes atractivos de hacerlo en dicha región es el precio medio de las clínicas, el cual está entre los 1.500€ y los 3.500€. Así es, hasta cuatro veces más barato que en España en el peor de los casos y doce veces más en el mejor. La diferencia es más que sustancial.
Pero, ¿lo barato termina saliendo caro? No en este caso. Ten en cuenta que Turquía ha sido una de las precursoras de este tratamiento, lo cual supone que lleva la delantera a las clínicas de otros países. Perfeccionando poco a poco sus metodologías, han logrado superar las expectativas de los pacientes. Por eso, siempre y cuando vayas a un cirujano de rigor, disfrutarás de los mejores resultados posibles a un precio de lo más asequible.
