La rama gaditana del partido de ultraderecha español Vox se encontró en el centro de otra controversia esta semana debido a lo que muchos verían como un inocente saludo festivo en su cuenta de Twitter, con una imagen que muestra a todos los Reyes Magos como hombres blancos.
Esto puede parecer inofensivo para los europeos del norte, pero en España la tradición dice que uno de los reyes, Baltasar, es negro, y esta tradición todavía se mantiene en todo el país, ya que los que participan en los desfiles se ponen el tipo de maquillaje de «cara negra» que en otras partes del mundo ofenden, como demuestra el furor por la afición del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, a este estilo de disfraces. Tan arraigada está la tradición que el correo de los Vox provocó una diatriba de comentarios irónicos que hacían referencia a la dura línea del partido sobre la inmigración, sugiriendo que quizás Baltasar había sido deportado o rechazado en la frontera española y acusando de racismo a la delegación de Cádiz.
Tan fuerte fue la crítica que el partido pronto retiró el puesto y lo reemplazó con una imagen diferente, esta vez mostrando una escena de un pesebre estrellado a la que, hasta ahora, no se han planteado objeciones.
Para resaltar aún más la diferencia de actitudes en todo el mundo hacia el «rostro negro», vale la pena recordar la disputa del año pasado por un saludo navideño enviado por Andrés Iniesta, el hombre que marcó el gol de la victoria en el triunfo de España en el Mundial de Fútbol de 2010. Iniesta, que ahora toca en Japón, subió una imagen de sí mismo ennegrecido como Baltasar, lo que provocó fuertes críticas por parte del presentador de BBC Radio 1, Nick Bright.
