Resultados inesperados después de que la manifestación fue trasladada al interior debido a la lluvia en la Costa del Sol!
Una exposición para demostrar las habilidades de los perros rastreadores de la policía en una escuela secundaria de Marbella produjo resultados inesperados el mes pasado, según informes aparecidos en la prensa nacional, cuando se detectaron pequeñas cantidades de hachís en las mochilas de tres estudiantes, todos los cuales fueron expulsados rápidamente durante 20 días.
Este incidente se produjo el 20 de noviembre en el colegio Las Dunas de las Chapas durante un acto organizado y aprobado por el personal del centro. Sin embargo, el horario tuvo que ser modificado y alterado de una manifestación en el patio de recreo a visitas a las aulas debido a la lluvia que cayó ese día, con la intención de no privar a los niños de la oportunidad de conocer y saludar a los perros altamente adiestrados y participar en algunos de sus ejercicios.
Pero para sorpresa de los oficiales que acompañan a los perros rastreadores – y del personal, que informa que esta no es una escuela «problemática» – tres mochilas fueron seleccionadas por los detectives caninos visitantes y se encontraron pequeñas cantidades de drogas en su interior. Los alumnos cursaban el primer y segundo año de la enseñanza secundaria obligatoria, es decir, tenían entre 12 y 14 años, y se informaba inmediatamente a sus padres.
Los oficiales explican que siempre llevan consigo una pequeña cantidad de hachís para demostraciones de este tipo, pero que, por supuesto, el sentido del olfato de sus perros y su entrenamiento extremo no pueden ser desactivados.
El caso ha causado una variedad de reacciones, sobre todo en lo que respecta a la decepción y la sorpresa de que niños tan pequeños deberían estar comprando drogas ilegales y, de hecho, que deberían tener el dinero a su disposición para hacerlo, pero fuentes no identificadas están presentando el incidente como una redada organizada de la que sólo la directora y el jefe de estudios tenían conocimiento de antemano. Una madre indignada es incluso citada en El País como quejándose de que «mi hija no tenía ni idea de lo que era el hachís, pero ahora lo sabe».
